Cortaste todo tipo de acceso que tu viera así ti, borraste todo rastro de mi presencia en ti, cambiaste cada dígito de tu numero y me eh quedado sin mi distribuidor, todo por este maldito error.
No debí haber pedido mas, la dosis era suficiente y lo sabia, pero por ambición te presione, que maldita
Sentada en este viejo sofá te veo en las paredes pero de inmediato te vas mis ojos en blanco sueñan contigo llorando y corriendo en este cuarto maldito.